Es indiscutible que la aceptación de uno mismo es el mejor pasaporte para ser feliz. Para ello, es imprescindible conocerse muy bien. Si nos conocemos bien por dentro y por fuera, si somos capaces de modificar aquello que no nos gusta de nosotros, de mejorarlo, de ser el tipo de persona que queremos ser, de modificar nuestro carácter y nuestra personalidad, de gustarnos físicamente para poder gustar a los demás .... seremos realmente sabios.
Porque aceptarse a uno mismo no significa conformarse y resignarse con esos aspectos que no nos gustan de nosotros.
Mª José Corral Benítez
2 comentarios:
La vida es, desde que nacemos hasta que morimos, una eterna búsqueda para saber quienes somos. Nunca llegamos a conocernos lo suficiente, siempre hay algo que se nos escapa. No aceptarnos tal y como somos (es decir, tal y como nos mostramos, pues no nos conocemos) es morirnos un poco a nosotros mismos y a los demás. Es ser más infelices, y cuanto más infelices somos nosotros, lo son los que nos rodean.
En fin, ¡ojalá yo supiera un minuto antes de morirme quien soy!
Pepe:
Puedes ser quien tú queras ser.
Un saludo.
Publicar un comentario