Los dongria kondh son uno de los pueblos indígenas más remotos de la India. Viven en las colinas de Niyamgiri, en el estado de Orissa, y veneran una montaña como a un dios.
Vedanta Resources, una empresa británica, pretende abrir una mina de bauxita a cielo abierto en la montaña Niyamgiri, India.
La mina destruirá los bosques de los que dependen los dongria kondh y destrozará las vidas de otros miles de indígenas kondh que viven en la zona.
El Tribunal Supremo de la India ha dado luz verde a la mina, pero los pueblos kondh están decididos a evitar la destrucción de su lugar más sagrado.
Mientras Vedanta Resources, una empresa con sede en Londres, se prepara para destruir sus bosques y su montaña sagrada con el fin de construir una enorme mina a cielo abierto, el nuevo documental de Survival se pregunta…
¿Qué hará un pueblo indígena para salvar todo cuanto conoce?
La Mina: Historia de una montaña sagrada Parte 1:
La Mina: Historia de una montaña sagrada Parte 2
Fuente: http://www.survival.es/
ENLACES:
- Medio Ambiente
5 comentarios:
¿Una empresa británica? ¿No son los mismos que condenaron a la cárcel a una pobre madre que practicó eutanasia con su hijo, para que no sufriera más los castigos de la inhumana y multimillonaria medicina moderna? ¿No son los mismos que esclavizaron a la India? ¿No son los mismos que asesinaron a los pueblos originarios de la América del Norte para quedarse con sus territorios? Sí, son los mismos infames de siempre.
Saludos.
Pampa Grande:
Siempre son los mismos. En uno u otro lugar, en una u otra época ... incluso en la película Avatar son los mismos. La misma clase de gente.
Un saludo.
Estoy impresionada...
No importan quienes sean los colonizadores, siempre hay dos lados: uno que gana a costa de cualquier atrocidad y otro que pierde...
¡Qué triste!
Un abrazo
Definitivamente el afán de dinero acabará con el planeta... Triste y lamentable que los pueblos más vulnerables sean siempre los perdedores en esta carrera por el lucro de unos pocos
Rosa María:
En el tema del medio ambiente todos somos perdedores.
Un saludo y bienvenida a este Laberinto.
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